Ayer tuvimos la oportunidad de disfrutar de El Lago de los Cisnes, probablemente la obra más icónica del repertorio, interpretado de forma magistral por el Ballet de San Francisco bajo la dirección artística de Tamara Rojo. La coreografía, la escenografía, y muy especialmente la interpretación de la primera bailarina, fueron absolutamente maravillosas.
La dualidad del personaje (Odette/Odile) permitió que demostrara su versatilidad y maestría en dos roles tan contrapuestos.
Fue una velada inolvidable para todas. Esperamos repetir en breve 💖